La Constitución no resuelve problemas diarios, consagra principios que deben materializarse en leyes. Eso lo sabe la clase política y juega a ello. Traduce sus programas en lenguaje constitucional, mantiene viva la ilusión del Pueblo, culpa al gobierno de ineficacias y torpezas, pero no toca la estructura del Poder.
Publicado el: 2023-12-20 06:00:54
Autor: Colaboraciones, Fuente: kaosenlared