Con su ilógica el fútbol puede ser una sucesión de enigmas. En esta semana europea se esperaban las portadas para Mbappé, gigante en la eliminatoria contra el City. Y resulta que ante el Atlético solo mereció tachas tras un duelo entre dos conjuntos tacañones, un partido solo aliviado por tres golazos. El mundo al revés. Nadie hubiera apostado un penique porque el gran paladín de los equipos españoles fuera Szczesny, un portero de 34 años alistado por sorpresa por el Barça cuando entre calada y calada se bronceaba en su retiro de Marbella. ¿Un fichaje de garrafón?.
Publicado el: 2025-03-06 11:06:26
Autor: José Sámano, Fuente: laopiniondezamora